Los ‘mini yo’ con superpoderes

look thep muñeco Tailandia

Bien cargados de amuletos y oro. Como debe ser. Foto: Mae Ning.

Cuando a uno le preguntan por su mini yo puede pensar en su pequeño amiguito. Vamos, en el pelado y el mismo que esconden las mujeres de sospechosa altura. En Tailandia, en cambio, cuando hablan de mini yo estos días pueden referirse a algo distinto. Más cercano al popular mini yo de Austin Powers.

Porque la nueva creencia y excentricidad tailandesa homenajea al folclore de vudú, pero a lo grande. Lo último en supersticiones es fabricarte un muñeco a tu semejanza -o con el que te sientas identificado- y mimarlo. ¿El motivo? Pues el de siempre. Dicen los entendidos que cuanto más dinero se invierte en el mini yo mejor suerte puedes recibir. Así es normal ver a estos títeres cargados de oro.

Esta nueva moda del más allá bautiza a los muñecos como look thep, lo que vendría a ser algo así como “el hijo de un Dios”. Y es la versión actualizada de una truculenta superstición tailandesa en la que se mezclaban fetos humanos, asados y magia, mucha magia negra.

Cómo no, el auge de esta tendencia tuvo que llegar gracias a la televisión. Y de la mano de un personaje del corazón siamés que hace de pinchadiscos y bien podría ser la versión siamesa de Paquirrín. Sólo que no es popular gracias a su sangre, sino por haber intentado ser mujer con manivela -por eso del glamour- y haber vuelto ahora a los cromosomas XY.

 

El ‘mini yo’ que le dio éxito a cambio de oro

 

look thep muñeco Tailandia

Ahora con chaqueta, el bueno de Pookkoh Thannatchayapan lleva ‘de gira’ a su muñeco de la fortuna. Fotos: Coconuts Bangkok.

Situaciones habituales en la interpretación religiosa que hace Tailandia del budismo y su comunión con toda superstición. Lo que llamamos el budismo del baht. Y si es normal ver a un monje dentro de un tuk tuk, frente a una estación de tren, bendiciendo billetes de lotería a cambio de limosnas, ¿cómo va a sorprender que exista una versión siamesa del vudú?

Estos muñecos look thep -o mini yos para los amigos- también proceden de la superstición religiosa de cuando aquí se libraban guerras en calzones. El bonachón de Pookkoh Thannatchayapan lo explicó ante las cámaras. Pasaba por una mala racha y decidió darle una oportunidad al más allá.

“El primer día que lo tuve, lo llevé de shopping para comprarle ropa en la sección de niños“, contó Bookkoh en un popular show televisivo, como recoge Coconuts Bangkok. “Justo después de pagar por sus prendas, recibí una llamada diciendo que el trabajo que me habían cancelado estaba de nuevo en marcha”.

Ahora, el pinchadiscos dice que ama a su muñeco “como si fuese de verdad”. Y no sólo lo lleva de paseo y le habla por su nombre, Wansai, sino que lo carga de metales. Dice que cuando le compró un pesado colgante de oro, le llamaron para un papel protagonista.

Nuestro amigo y pinchadiscos Pookkoh es el caso más popular de los mini yos que ofrecen fortuna a cambio de atenciones, previo paso por caja. No sabemos si el muchacho ha dejado de travestirse como le gustaba y ahora viste traje porque se lo pide su Wansai. Pero deja claro que los look thep se han vuelto populares en estas latitudes.

 

Magia negra y necromancia en el pasado

 

Look Thep Mae Ning

Podría ser el chico malo del barrio o un rapero si no fuese porque el oro lo carga para dar suerte. Foto: Mae Ning.

Dice la versión actualizada de la superstición que los look thep invitan al espíritu de un niño a adoptar el cuerpo de plástico. Al fin y al cabo, no es más que la forma edulcorada de una práctica necromántica siamesa que era muy popular cuando lo de las guerras en calzones. Se dice que daba fortuna.

Dicha superstición se llamaba kuman thong, lo que se traduciría como “el chico de oro” y que nada tiene que ver con la película de Eddie Murphie. Tenía que ver con el budismo tailandés, pero nada que ver con la religión fuera de estas tierras. Como siempre, la mezcla con la magia negra local daba origen a lo más variopinto.

En los escritos de magia negra se explicaba que, para invocar a un chico de oro, primero se necesitaba un feto muerto en el estómago de una embarazada. Se retiraba el cuerpo sin vida y se llevaba a un cementerio, donde se invocaba al espíritu de un bebé desaparecido para que entrase en el feto.

Luego se asaban los restos del no nato cual cochinillo y se disecaban. O al menos eso dice la tradición mágica. A partir de ahí, se trataba con todas las atenciones al ídolo creado a partir del feto. Cuanto más oro se comprase, mejor.

look thep

Trabajando con papá. Foto: Mae Ning.

Aun así, en la actualidad tampoco hay que torcer el gesto ante una práctica necromántica como la de los kuman thong o chicos dorados. La época en que se asaban fetos en los cementerios siameses data de los siglos mozos del país, luego se fue edulcorando el proceso para quitarle excentricidad.

Dicen que, con el tiempo, pasó a hacerse con ídolos de madera. Y en lugar de usar un feto se utilizaban fluidos del no nato o de la madre muerta para untar en el títere.

Aunque siempre hay alguno a quien se le va la mano y quiere volver a lo de usar fetos humanos. Como el taiwanés que encontró la policía con seis fetos disecados y cargados de oro en una habitación de hotel. Según parece, quería venderlos en Taiwan por unos 5.000 euros cada uno. Y es que las películas tailandesas de fantasmas siguen hablando de esos chicos de oro que partían de los cuerpos de no natos.

Visto de esta forma, la moda de los look thep es de lo más inofensiva. Se crea en la magia o no, el muñeco se hace con plástico y pintura y no con restos humanos. Y se compran hasta en Internet. Para ver algunos de los muñecos más elaborados, la más popular creadora de look thep, conocida como Mamá Ning, los enseña en su página de Facebook.

Mejor eso que cualquier resto humano. Y quien quiera comprar oro para sus hijos de plástico pensando que ese cuerpo está habitado por un niño, pues todo estará bien mientras no se le vea vagar por el área de prenatal de un hospital.

 

Todo está en el oro y los amuletos

 

Accidente Tailandia

“Mi amuleto me ha salvado la vida, es el mejor seguro para no sufrir accidentes”. Foto: Daily News Thailand.

No es la primera vez que hablamos de supersticiones y creencias tailandesas. Casos de magia negra como los supuestos hechiceros que se ha llevado a la guapa del pueblo al catre o en los que los militares visitan a chamanes camboyanos antes de tomar el poder. Así cogían fuerzas y los espíritus estaban de su lado.

Sin embargo, lo de las carreteras siempre tiene su punto especial. Desde los coches negros con pegatinas que dicen “este es un coche blanco”, porque da buena suerte, hasta los taxistas que se agarran a sus figuras de Buda y a sus talismanes cuando van demasiado deprisa.

Mientras escribo estas líneas, me topo con el último caso conocido de los que salvan sus vidas gracias a sus amuletos. En este caso, un tipo se despeñó con su coche y salvó el pellejo de forma milagrosa. Ni corto ni perezoso, ha lanzado a los cuatro vientos que no le pasó nada gracias al carísimo amuleto que colgaba de su cuello.

Nuestro afortunado me hizo recordar al empresario que se estrelló con un Lamborghini y salvó la vida, pese a partirse el coche por la mitad. Cómo no, dijo que salió ileso gracias a su amuleto.

Así funcionan las supersticiones. El amuleto puede salvar tu vida en un deportivo que se parte por la mitad. Para nada importa que semejante coche esté diseñado para separarse en dos partes y salvar así la vida del piloto. Porque hay hechos que, en Tailandia, son casi imposibles de cuestionar.

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3 comentarios

  1. NONAME dice:

    Qué mal rollo todo esto de los muñecos y los fetos… Oo

  2. Aaron dice:

    Parece Chucky el muñeco Diabólico………. jejejejeje
    Dejando un poco el chiste. Wao dándole oro concede deseos y fortuna. Realmente pensar que estamos solo en este universo y que no existen espiritus del mas alla y que somos los únicos habitantes en todo el planeta y la galaxia. Creo que es vivir en ignorancia, el problema es que con todo esto de la magia, brujerías, amuletos de la suerte y todo eso. Siempre existirá alguien que no sabe nada y solo quiere cobrar por un trabajo que no servirá de nada. Después de todo siempre hay que recordar que no hay que usar superstición o poderes sobrenaturales para dañar a nadie.

  3. Aaron dice:

    http://www.elmundo.es/f5/2016/01/25/56a63988268e3e754d8b4585.HTML

    Las muñecas Look Thep o Ángeles infantiles también pueden viajar en aerolíneas tailandesas. Esta es la nueva moda Tailandesa……… jejejej

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