La foto: Trabajo precario para levantar pisos en Tailandia

Seguridad laboral Bangkok Tailandia

Para trabajar en la fachada nada mejor que una tabla a modo de silla sujetada por dos cuerdas. Es una foto tomada desde lo alto del BTS en Pra Khanong, la caída era de agarrarse los machos.

En Tailandia el ladrillo les pone tan lujuriosos como verracos nos ponía a los españoles. Será que a las culturas donde el sol calienta la mollera al personal sólo les gusta el pelotazo fácil. Y también como a nosotros, lo de hacer un trabajo bien hecho se cumple a veces. Y eso no significa que sea muchas veces.

Sansiri Bangkok

Son muy bonitos y modernos, pero los construyen como en la foto de arriba.

Lo que en tierras siamesas no tienen una Unión Europea que les machaque una normativa, así que lo de la seguridad y el buen hacer se cumple de aquella manera. Ahí en la foto tenemos al típico trabajador que se dedica a hacerle algo a la fachada del edificio. Es muy normal verlos ahí sentados en su tablita pintando exteriores o reparando vaya a saberse qué.

El asunto es divertido porque esos currantes tailandeses son como los ejemplos del trabajo español. El tailandés hace más horas que un reloj y productivo es poco. Le gusta hacer la siesta en el trabajo y escaquearse para comerse un arroz. O llevar el coche al mecánico en su jornada laboral. Me recuerda mucho a una cultura mediterránea adicta a las tapas, vamos.

Pero claro, en Tailandia están en plena efervescencia de su (segunda) burbuja inmobiliaria. La de los condominios, esos rascacielos modernos con apartamentos, piscinas y miles de comodidades más. El asunto pinta feo. Los precios se han inflado al estilo hispano y se teme un tortazo de los grandes.

Y de lo peor del caso es que a veces se construye mal. Muy mal. Como el ejemplo que me ha ocurrido este año a mí.

 

Un trabajo cuestionable en condos de nivel

 

Condo en Bangkok Sansiri The Base

Vista desde la piscina de Sansiri The Base en On Nut.

En Tailandia, los condominios de nivel nombre y marca. Como tu teléfono móvil o tu coche. Y no es lo mismo tener un Life que un Ideo, aunque ambas marcas tienen su reputación. Y lo de la marca importa, que Tailandia es más marquista que España. A la gente le encanta decir “vivo en un Ideo” como el que dice “es que yo conduzco un Audi”.

Una de las marcas más reconocidas y más ansiadas es Sansiri. Se anuncia en el metro como el lugar de la vida confortable. Y, si todo va bien, a principios del año que entra yo me mudo a un Sansiri, concretamente a The Base, en On Nut. Un condominio que, no obstante, ha dado que hablar en los medios locales este año.

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El jabón de la discordia en la habitación de Sansiri de Base

La precariedad en el trabajo y las peculiares formas tailandesas hicieron mella en The Base y en el buen nombre de Sansiri. A finales de agosto, un comprador extranjero descubrió que en las paredes de su apartamento habían usado jabón en lugar de hormigón. La pared le goteaba, abrió un zócalo en su ventana, y se encontró la enjabonada.

Igual que en España se hicieron las mil perrerías y el Vicente Calderón sufría de aluminosis, los condominios de lujo tailandeses también sufren las malas prácticas del trabajo de levantar pisos.

¿Lo mejor? La excusa que dieron de buenas a primeras al comprador. “El trabajador que se encargaba de poner hormigón en las paredes estaba “gandul” aquel día y le dio pereza hacer el trabajo bien. Lazy, lazy le repitieron al buen señor, ante su pared destrozada. Los tailandeses llevan muy mal lo de asumir su error, así que con sonrisitas tuvieron que disculparse al farang lo que había ocurrido.

Al final, Sansiri tuvo que dar la cara bien, medios de comunicación mediante, y untar al propietario afectado para que volviese a hablar bien de la marca. Pero seguramente se miren mejor cómo hacer su trabajo y levantar los pisos. En cualquier caso, yo creo que me mudaré a The Base en On Nut. Si aparece jabón en mi cama ya lo contaré por aquí.

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3 comentarios

  1. Iñaki dice:

    Yo desde que estoy aquí viviendo no paro de preguntarme cómo no se dan cuenta de que el camino este de crecimiento sin medida inevitablemente lleva al colapso, y eso que ellos, como dices, ya han tenido su crisis, la del 97, aunque no se si aquella fue mas financiera que inmobiliaria. En cualquier caso, esto petará antes o después. Aquí en Chiang Mai tb se nota el boom de la construcción, el boom de los coches, de los centros comerciales que no paran de levantar, del turismo que no deja de venir. En fin, hasta que los chinos se cansen de “Lost in Thailand” y decidan irse para otro lado…
    Siempre tropezamos en la misma piedra
    Un abrazo!

    • Lo de la construcción es alucinante, pasas cinco meses fuera de Bangkok y cuando regresas han hundido urbanizaciones, restaurantes, mercadillos… y te encuentras más excavadoras. Y ya puedes decirle que Europa y América ha pasado por ello, que ellos siguen diciéndote que “en Tailandia es diferente, aquí comprar un piso es garantía de seguridad.

      Ha de ser muy curioso lo de los chinos en Chiang Mai. Todos locos por la comedia de moda. Es un turista un tanto… peculiar. Se comporta bastante mal y deja poco dinero, pero ahora les quieren dar vía libre en el visado.

      En Hong Kong, que he ido bastante, están hartos de ellos. Hay un nuevo racismo entre nuevos ricos del continente y de la ex colonia inglesa por cómo se comportan en la isla.

      A ver si a finales de enero voy a Chiang Mai, que tengo varios amigos viviendo allí, ¡abrazo!

  2. Aaron dice:

    ohh…. shit jabon

    Coño donde esta el ingeniero del proyecto, entonces el trabajador puso eso y no se dio cuenta y le pago. Realmente el tema de la construcción si es algo que hay que jugar vivo pero bueno en este país parece que hay que tener mas calma en las cosas, pero aun así es una compra.

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