Comedias tailandesas, ¿risas en el cine con culos y ‘caca’?
Soy adicto al cine asiático desde que era un chaval. También al género de la comedia, en el que Oriente ha ofrecido verdaderas joyas que forman parte de mis películas de risa favoritas. Y sin embargo, aún estoy buscando una película tailandesa que logre desternillarme, ya que en Siam las cintas de humor suelen ser bastante sosas, a excepción de la simpática Somtam.
Las comedias tailandesas tienen muy buenas intenciones, pero la mayoría acaban cometiendo los mismos fallos que la televisión del país. Estúpidos sonidos para explicar cuándo el público ha de reír, caídas tontas y repugnancias varias. Todo ello muy gráfico. ¿Qué sería de una comedia tailandesa al uso sin el típico pedo que no viene a cuento o sin escenas como comer gusanos vivos y gente meándose encima?
Una buena prueba de lo que hay en el género lo podemos ver en el rompe-taquillas tailandés de estas navidades. Una película que además trata de algo muy del día a día: la particular forma en que los tailandeses hablan inglés y sus relaciones con otras nacionalidades. Evitando el tópico del extranjero occidental en busca de damisela, claro. ¿Su título? I Fine Thank You Love You. Con mucho sentido por estos lares.
Una muy buena idea estropeada por culos y ‘caca’
No cabe duda que lo que cuenta I Fine Thank You Love You tiene su miga. Porque, en su primer día, la película recaudó la friolera de 29 millones de bahts, siendo el segundo mejor estreno en la historia del cine tailandés, y batiendo a la anteriormente exitosa comedia Pee Mak Phrakanong. Puedo dar fe que además ayer en el cine el resto de la sala reía a plena garganta con algunos de los gags de esta nueva cinta.
Me atreví a verla sin subtítulos en inglés, y puedo decir que con unos conocimientos medios de tailandés se entiende con facilidad, ya que no habla de nada muy difícil. No está localizada al inglés, así que hay que verla a pelo en las salas tailandesas. En parte, porque gran parte de la película está en inglés y en esos momentos se muestra la traducción a la lengua local.
Lo mejor de I Fine Thank You I Love You son sus buenas formas. La idea es realmente intersante y los guionistas han hecho un esmero en algunos detalles. Y es que su trama gira alrededor del thainglish y de qué manera los tailandeses se lían con la lengua global. El propio título indica lo único que muchas personas saben hablar en sajón por aquí. Porque todas las clases de inglés en la escuela empiezan con la profesora diciendo a los chavales que se levanten y preguntándoles cómo están. I Fine es su respuesta, seguida de un Thank You. Lo del Love You no hace falta explicar por qué se conoce.
El protagonista es un macarra que monta una moto enana, hace caballitos con ella y, si bien es hijo de un francés, de hablar algo que no sea tailandés nada de nada. Pero, casualidades de la vida, se ha enamorado de una japonesa y ella quiere romper con él tras unos meses de relación. La joven no habla tailandés y él no habla inglés, así que no pueden comunicarse y la chavala opta por irse a Estados Unidos.
Divertido es que quien interpreta a la nipona es Sora Aoi, una actriz porno japonesa venida a menos que fue muy popular en su país al tener una pechera de excepción sin pasar por bisturí. Incluso ganó un año en los Best Breast Awards, algo así como los Goya pero a las mejores delanteras. Cuando en su país empezaron a desecharla -toda mujer objeto en tierras niponas suele ser abandonada como objeto a los 25-, se vino a Tailandia y grabó la comedia juvenil Hormones. Desde entonces, cada vez que el cine siamés necesita a una japonesa sin muchas luces, pero viciosa, la llaman a ella.
Tras el chiste inicial de nuestra nipona calenturienta, que se pone a hablar en voz alta de que el sexo es su vida mientras molesta a una tradicional mujer conservadora de Tailandia, le explica a su profesora de inglés que la quiere contratar para explicarle a su novio por qué han de cortar. Según ella, lo de dedicarse a matar espermatozoides sin poder comunicarse ya le aburre.
El tópico está servido. La profesora de inglés, una chica muy fina y de estudios notables, se verá las caras con el macarra de barrio que no vale para mucho. Él no aceptará que su nipona quiera romper con él y le pedirá a la profesora que le enseñe la lengua global. Sin desvelaros nada fuera de lo común, os podéis imaginar cómo acabará la película. Sí, igual que si fuese otra comedia romántica de Hollywood.
Lo que realmente destaca de la cinta es la intentona de los guionistas por explicar qué es el inglés en Tailandia, sobre todo a nivel de clases sociales. Desde el tipo de barrio que va en moto y no habla más que tailandés hasta el hombre adinerado que prefiere hablar inglés en lugar de usar su propia lengua.
El guión va un poco más allá y uno de los momentos más entretenidos es cuando este muchacho de tan buena familia, poseedor de casas, coches europeos y barcos veleros, se pone a hablar tailandés emulando el acento que tenemos los occidentales para ganar glamour. Vamos, como si un español hablase con acento de guiri de playa, sólo que entre los más ricos de Siam es algo bastante común.
Este personaje rico y que trata de hablar su lengua de la forma incorrecta en que lo hacemos los occidentales es otro de los aciertos de I Fine Thank You Love You. Porque la película abandona ese tópico tan asiático del joven rico y guapo que rescata a la guapa, para mostrar cómo este tipo de personaje suele ser bastante soso. Al elegir entre el macarra y el rico, la protagonista se queda con el primero. Y la conclusión de la película es que el tipo de barrio y que tiene gracia es mejor partido. Algo muy común en las historias occidentales, pero no tanto por estos lares.
Todo eso está muy bien. Pero los productores de semejante blockbuster con sabor a guindillas no iban a arriesgarse sólo con chistes elaborados -que los hay y muchos- sobre los enredos del thainglish. Tenían que jugar sobre seguro y poner lo que nunca falla en comedias tailandesas. Culos peludos y caca, además de varios escupitajos.
Todo ello rompe lo bueno de la película. Por ejemplo, en una escena están el protagonista y varios amigos en su casa y, de repente, aparece una lagartija. Se ponen todos a mirarla. Al final, el reptil se sube a la mesa y de ahí trepa por el brazo del compañero de piso de nuestro héroe. Pues este individuo logra que la lagartija entre en su culo y empieza a aplicarle presión con su ano hasta que la ahoga. ¿Era necesario?
Peor aún es una escena de una fiesta en una terraza en la que, para celebrarlo, un gordo entrado en muchas carnes se baja los pantalones, pone su culo en pompa y sus amigos le meten un cohete de fuegos artificiales. Vemos cómo su culo se llena de explosiones y luces de colores. Todo un espectáculo, vamos.
Para rematar, hay una escena en la que el prota le arranca a un estudiante sus calzoncillos en una disputa y resultan estar cagados. Empieza a salir la caca en varios sitios, con primeros planos de ello, y todo el mundo gritando. Recordemos que estamos hablando de la película siamesa del año.
Este es uno de los motivos por los que no suelen gustarme las comedias tailandesas. I Fine Thank You Love You deja bastante claro que el cine de risa aquí olvida cualquier intentona de humor brillante para respaldarse en lo fácil y groseramente visual. Y mientras a los hongkoneses les funciona, en Siam parece que no dan con la tecla.
Una pena, esta cinta prometía. Pero al final queda enturbiada por asuntos como los soniditos estúpidos que indican el momento en el que el público se ha de reír. Algún día deberían pasar Torrente en la televisión tailandesa, quizás Santiago Segura ganaba algunos fans.
Otras comedias tailandesas
Tras comentar la comedia tailandesa de moda estos días, podemos dar un repaso a algunas películas que han hecho reír mucho al público tailandés. Y para empezar, qué menos con una que ocurre en Pattaya y tiene a un farang metido en el asunto.
Somtum, del año 2008, sí que me convence a mí. Quizás es la única comedia tailandesa con la que realmente he disfrutado, pese a ser una enorme tontería en muchos aspectos. Trata sobre la historia de un australiano que, en su primer día en Tailandia, es robado en Pattaya por una mujer que le droga. Algo muy habitual en la ciudad.
Tras ese arranque, nos queda una película de humor con todos los ingredientes para sacarnos unas risas. El actor protagonista es Nathan Jones, un popular peleador de lucha libre en Australia, además de un hombre gigante. En la película, será rescatado por unas adolescentes que le enseñarán a pelear en Muay Thai.
La cinta tiene momentos muy buenos, sobre todo cuando ese armatoste de farang come ensalada de papaya picante, lo que le convierte en un terremoto humano como si fuese Popeye con unas espinacas.
Los chistes están asegurados, junto a varias peleas de Muay Thai y algunas situaciones bastante cómicas. El reparto tiene a un montón de actores y actrices del panorama televisivo tailandés y también a una ex campeona de taekwondo muy popular en aquel momento. Muy divertida si se le perdonan los escasos medios y algunas de las niñerías del cine siamés.
Otra más popular es Pee Mak Prakhanong, cuyo tráiler tenéis sobre estas líneas. Es una clásica película tailandesa de fantasmas, pero convertida en comedia. Un muchacho espera reunirse con su novia al volver de la guerra, pero ella se ha convertido en un fantasma y asegura momentos de humor en la película. Me pareció entretenida en su momento, pese a algunos chistes tontos. Vamos, tiene su punto.
No deja de tener su gracia que el director de esta comedia fuese el mismo que Shutter, un clásico del terror tailandés. Tiene también otra comedia romántica llamada Hello Stranger y que habla del idilio de dos tailandeses perdidos en Seúl. Si bien a mí me dejó frío, es muy popular aquí y tiene buenas críticas. Cuanto menos, habla de lo que es viajar a otro país y muestra mucho de la capital coreana.
También muy exitosa en su momento, y con enorme dispendio en marketing, fue ATM, otra comedia romántica -siempre se ha de hablar de amor- con la misma protagonista que I Fine Thank You Love You. Su trama gira entorno a un cajero automático que dobla el dinero, lo que afecta a dos directivos del banco al que pertenece la máquina, y que además son pareja.
Si bien tuvo éxito en taquilla, no se recuerda con cariño esta película en Tailandia, aunque entre el público occidental funcionó más o menos bien. En el caso de que alguien esté saturado de tanta comedia de amor, siempre queda la opción de Sars Wars, una popular cinta de zombies y risas hecha en Tailandia. Tiene diez años, pero tiene sus seguidores.
Yo preferiría recomendar otras cintas de Hong Kong o Japón antes que estas comedias tailandesas, pero como este no es el lugar, mejor dar dos recomendaciones que se salen un poco del género. Suckseed y The Billionaire. Ambas están protagonizadas por Pachara Chirathivat. La primera es una película con tintes de humor sobre una banda de rock tailandesa. La segunda es la historia real del creador del snack de algas secas Tao Kae Noi. Ambas cintas son bastante curiosas.
A mi lo que me duele del cine asiatico son los movimientos casi tortuosos que hacen en cada gesto… A veces piensas que son un animatronic estropeado xD. Supongo que cuando llevas 1000 peliculas iguales te acabas acostumbrando pero prefiero el genero Wuxia chino ( tigre y dragon, etc )… Tambien hay algunas buenas en corea del sur de este estilo 🙂
En Corea del Sur se hace muy buen cine. Pero en Tailandia es más escaso, si bien hay algunas películas buenas. Peor que los movimientos, en el cine siamés los personajes hechos por ordenador suelen ser horribles. En la arriba comentada hay una lagartija hecha en 3D que canta más que una almeja…
He visto algunas películas Tailandesas que valen la pena como My Ex, The legend of Sudsakorn, Secret Sunday, Ong Bak, The Protector, Siyama Village Warriors, Dynamite Warrior, The Tiger Blade, Yes or No, Hit Man. Comedias solo he visto The Gig 1,2,3 me parecio buena tiene escenas chistosas. La verdad que creo que las que he mencionado son bastante buenas. Por otro lado Creo que Tony Jaa es uno de lo mejores actores de Tailandia si hablamos de películas de acción. Quizas algunas películas chinas o japonesas puede ser mejores. Pero el cine Hindi no me lo aguanto coño 3 o 4 horas de película es como para cagarse en el patalon, y orinarse, quedarse dormido allí.
El cine indio es muy duro, pero con ‘Singham’ me lo pasé en grande…
SI Realmente he visto algunas que el tema parece interesante, pero creo que los directores de Bollywood quieren hacer una novela en vez de una película y cuando realmente extiendes demasiado la trama de la película es muy facil perderle el gusto que le habias tomado al principio. Creo que los directores no piensan en eso y asi es muy fácil perder publico si realmente les interesa que otros vean sus películas, deberían cambiar.
Hola Luis
Vi la película Som Tam – Muay Thai Giant estuvo divertida…………..jajajaj
Gracias